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sábado, 31 de enero de 2009

Chris Webber. Leyenda maldita.



Siendo sólo un adolescente asombró al mundo del baloncesto en su primer año en la Universidad de Michigan. Aquel equipo de los Wolverines desafió al poder establecido e hizo historia al llegar a la final four con un quinteto formado exclusivamente por freshmen. Jalen Rose, Jimmy King, Ray Jackson, Juwan Howard y por encima de todos Chris Webber, revolucionaron la NCAA con su estilo de juego insolente, desafiante y chulesco. Su imagen transgresora, con pantalones muy anchos y calcetines negros ( algo insólito en la NCAA por entonces) dio la vuelta al mundo y no dejaba indiferente a nadie. Los Fab Five sólo duraron dos años; tras perder la final del 93 con aquel famoso tiempo muerto, Webber se presento al draft de la NBA donde fué indiscutiblemente elegido número 1 por Orlando, que le traspasó esa misma noche a Golden State a cambio de Penny Hardaway.
En Oakland, Webber dejó claro que su talento era tan efectivo entre los profesionales como lo había sido en la universidad, pero su tormentosa relación con Don Nelson hizo que le traspasaran a Washington al final de su año rookie. Allí coincidió con Juwan Howard e incluso fué elegido para el allstar game de 1997, pero el 14 de Mayo de 1998 los Wizards le traspasaban a Sacramento Kings. Ese traspaso marcó un punto de inflexión en su carrera, allí, en un equipo formado por jugadores como Doug Christie, Vlade Divac y Pedja Stojakovic, desplegó su mejor baloncesto regalando a los aficionados de todo el mundo momentos inolvidables; los Kings eran admirados por su buen juego e incluso forzaron 7 partidos a los Lakers del mejor Shaquille en la final de conferencia de 2002.
A pesar de su magnifico juego, esa final de conferencia fue el tope para un equipo que poco a poco empezo a desmembrarse, cerrandose el ciclo con el trapaso de un Webber muy lastrado ya por las lesiones a Philadelphia, donde a pesar de su mal estado físico promedió 20 puntos y 10 rebotes por partido. Tras su periplo en la ciudad del amor fraternal, a Webber aún le quedaban fuerzas para intentar su asalto a un título que no llegaría y fichó como agente libre por los Pistons, donde estuvo media temporada. Tras su breve estancia en Detroit intentó seguir jugando y no encontró mejor lugar que aquel en que comenzó su viaje, Oakland, pero las piernas de C-Webb tenían demasiados kilometros encima para aguantar el ritmo de los jóvenes Warriors, por lo que decidió su retirada.
Ahora, dentro de unos días, los Kings de Sacramento le rendiran honores retirando su legendario número 4, en una ceremonia llamada a hacer justicia para un jugador al que su mala relación con la prensa (sobre todo con la rosa, a raíz de su relación con Tyra Banks) siempre le pasó factura, a un jugador al que enseguida encasillaron en la llamada generación X de jugadores malditos que llegaron a la NBA en los 90 (Sprewell, Iverson....), a un jugador que nunca obtuvo el reconocimiento que merecía.
A partir de la proxima semana, esa deuda quedará saldada, la bandera con su número colgado del techo del Arco Arena, servirá para que nadie olvide al genio de Detroit, a un hombre apasionado por la cultura afroamericana y licenciado en psicología por la Universidad de Michigan , pero sobre todo a un hombre que desde sus 2,08 de estatura era capaz de hacer magia como si fuese un base de 1,90. Gracias por todo Chris!

miércoles, 28 de enero de 2009

sábado, 24 de enero de 2009

Andrea Bargnani. El renacer de "il mago".


Cuando Bryan Colangelo decidió apostar por el italiano Andrea Bargnani en el draft del 2006, mucha gente pensó que el riesgo era demasiado grande y que no merecía la pena apostar por un chico que había destacado en la LEGA, pero que parecía no estar demasiado hecho para la NBA. A mi en su momento me pareció una buena elección, es verdad que había jugadores más hechos y con un físico más apropiado para rendir desde el primer partido, pero el jóven romano tenía muchísimo talento y una capacidad de mejora muy superior a algunos de sus compañeros de promoción. Al finalizar la temporada 06/07 las primeras voces críticas comenzaron a decir que el número 1 del draft había sido un fiasco, pero despues de la pasada temporada pocos eramos los que seguiamos confiando en Bargnani. La explosión de jugadores como Lamarcus Aldridge, Rudy Gay, Rajon Rondo y sobre todo Brandon Roy, a los que Colangelo había dejado escapar la noche del draft, dejaba en muy mal lugar al "il mago", que sufría en sus carnes el tener que jugar en una posición que no era la suya, así como tener que defender a jugadores mucho más fuertes e incluso más rápidos que él.
Este verano con el traspaso de T.J. Ford a Indiana a cambio de Jermaine O´Neal, parecía que la pogresión del italiano terminaría por estancarse definitivamente al perder protagonismo en el equipo, pero las lesiones casi crónicas de O´Neal y sobre todo el cambio de entrenador han hecho resurgir la figura de "il mago". Desde que Jay Triano está al frente del equipo la mejora en el rendimiento de Bargnani está creciendo exponencialmente partido a partido, mostrandose mucho más agresivo de cara al aro pero sin perder la prodigiosa muñeca que había mostrado anteriormente. En la franquicia siguen manteniendo intactas sus esperanzas en el jugador, hasta el punto de que Colangelo ha declarado la semana pasada que es el único jugador no traspasable junto a Calderon y Bosh, poniendo en el mercado a Jermaine O´Neal.
Lo que parece más difícil ahora es recuperar la confianza por parte de los aficionados, ilusionados con la repentina mejoría del italiano, pero que siguen sin poder quitarse de la cabeza al número siete de Portland........

jueves, 22 de enero de 2009

viernes, 16 de enero de 2009

Jugadores Legendarios. Julius Erving.


Hubo un tiempo en que el baloncesto se jugaba a ras de suelo, los jugadores eran menos físicos y ningún mortal se atrevía a desafiar a la gravedad. Afortunadamente un hombre fué capaz de reinventar este juego y llevarlo a unas cotas de espectacularidad nunca antes vistas. Aquel hombre nos demostró que se podía "volar", aquel hombre no era otro que el "Doctor J".

Julius Winfield Erving II nació el 22 de febrero de 1950 en Roosevelt, New York. En esa misma localidad comenzó a fraguar su leyenda dando autenticas exhibiciones en el equipo del instituto, en el cual conocería a un amigo que comenzó a llamarle "doctor", debido a que Julius le llamaba a él "profesor". Con los años el famoso apodo de "Doctor J" haría referencia también a su modo de "operar" en la cancha, pero su origen como hemos visto era bastante más simple y poco o nada tenía que ver con el baloncesto.
En 1968 comenzó sus estudios en la Universidad de Massachusetts, donde promedió unos insultantes números de 26 puntos y 20 rebotes por partido en las dos temporadas que permaneció en el campus. En 1971 dejó los estudio sy firmó un contrato como agente libre con un equipo de la extinta ABA, los Virginia Squires. Allí Erving brillaría con luz propia las dos siguientes temporadas, anotando 27 y 31 puntos por partido respectivamente, pero el equipo no era lo suficientemente bueno como para que el Doctor J les llevara a la cima. De tal modo que antes de comenzar la campaña 73/74 los Squires traspasaban a Erving y Willie Sojourner a New York Nets a cambio de George Carter, los derechos del draft de Kermit Washington y dinero.
En tres años en los Nets, Erving consiguió dos campeonatos , tres MVP´s y sobre todo se convirtió en la cara más reconocible de la liga, que siempre será recordada por las imagenes del Doctor J volando con su pelo afro y el balon tricolor.
En 1976 la ABA se desintegró y varios equipos, entre los que estaban los Nets, pasaron a formar parte de la NBA, pero problemas entre el jugador y la franquicia, que no quería pagarle más dinero obligaron a los Nets a vender los derechos sobre Erving a otro equipo, los Philadelphia 76ers tan sólo 24 horas antes de comenzar la temporada, por un precio de tres millones de dólares. En su primer año en la ciudad del amor fraternal Erving causo un impacto inmediato, llevando a los Sixers a las finales , pero allí unos superiores Blazers les apartarían de la gloria. Lo mismo les ocurrio en 1980, cuando cayeron en las finales ante Los Angeles Lakers. El Doctor J era uno de los mejores jugadores de la liga pero a los Sixers les faltaba un jugador dominante en la pintura para pasar al siguiente nivel. En 1981 Erving realiza su mejor campaña en la liga a nivel individual y es elegido MVP, pero el hombre alto que necesitaba Philly seguía sin llegar, al contrario que las derrotas en playoffs. Esta situación cambió en la temporada 82/83, Philadelphia se hizó con Moses Malone, de tal modo que ahora todas las miradas recaían sobre Erving que debía llevar al equipo a cotas nunca alcanzadas. Erving acepto el desafío y los Sixers dominaron la temporada por completo, perdiendo sólo un partido en los playoffs ante Milwaukee y destrozando a Lakers en las finales.
Tras el campeonato el Doctor J continuó cuatro campañas más en activo para retirarse al final de la temporada 86/87, en la que fué homenajeado en cada cancha que visitó. Despues de más de 30000 puntos anotados entre la ABA y la NBA, un anillo de campeón de la NBA , un MVP de la NBA y tres de la ABA, 11 presencias en el allstar, una elección como uno de los 50 mejores jugadores de la historia y multitud de reconocimientos individuales, la carrera de Julius Erving se había terminado. Pero la leyenda del Doctor J seguirá viva para siempre, porque el fué quien inspiró a muchos jugadores ( Michael Jordan reconoció que Erving era su ídolo deportivo) para que el baloncesto sea lo que es hoy, el fué el pionero que se atrevió a llevar el juego a las alturas, desafiando a la lógica y al orden establecido, el fué el primer jugador en dejarnos imagenes inolvidables de mates sobrenaturales como el que hizo frente a Lakers en las finales del 80, el fué un innovador, un creador, un mago del balón y sobre todo.....un jugador legendario.

Iván D.R. 2009

jueves, 15 de enero de 2009

sábado, 10 de enero de 2009

Shaquille O´Neal. La última leyenda.


Cuando la temporada 2009/2010 llegue a su fin, la NBA y el mundo del baloncesto en general dirán adios a uno de los mejores jugadores de todos los tiempos. Ese día la carrera de Shaquille Rashaun O´Neal llegará a su fin y con él se cerrará un ciclo, el de los grandes pivots de los años 80 y 90.
Los más jóvenes tal vez sólo vean en Shaq a un gran jugador en el ocaso de su carrera, pero estamos hablando sin duda de uno de los cinco mejores centers de la historia y uno de los jugadores más dominantes de todos los tiempos. Un jugador que en sus primeros siete días en la liga fue nombrado jugador de la semana, que en sus primeros meses de competición destrozó dos canastas con dos mates descomunales ( uno en New Jersey y otro en Phoenix) y que promedió 23 puntos y 14 rebotes en su primera campaña en la NBA. En sus primeros 4 años transformó a un equipo novato como eran los Orlando Magic en todo un finalista en la NBA, pero en el verano de 1996 reventó el mercado con su fichaje por Los Angeles Lakers. Allí fué capaz de elevar su juego a un nivel superior y en 2000, 2001 y 2002 hizo campeones a los amarillos dominando la liga a su antojo. Shaq no tenía rival, pero las turbias relaciones con Kobe y con Phil Jackson ( luego se demostraría que también con Kupchack) le hicieron ser traspasado a Miami Heat. Allí su nivel de juego comenzaría a decaer poco a poco , pero aún así fué vital para la consecución del título en 2006. Ahora el legendario pivot da sus últimos coletazos bajo el sol de Phoenix, en un equipo para el que lograr el campeonato parece algo ciertamente utópico, pero que estará dando guerra en los playoffs . Sea como sea, debemos disfrutar de los últimos destellos de Shaq, que este año está en unos más que interesantes 17 puntos y 9 rebotes, algo más que meritorio si pensamos que es un hombre que lleva 17 temporadas a sus espaldas y está a punto de cumplir 37 años. El propio O´Neal dijo en su día " he destrozado a todos los grandes pivots que llegaron a la liga en los 80 y los 90 salvo a Olajuwon, y los que llegaron con el nuevo milenio cambiaron su forma de jugar para no tener que enfrentarse a mí ". No le faltaba razón, ahora en sus últimos días sólo nos queda disfrutar.

domingo, 4 de enero de 2009

Devin Harris. Ha nacido una estrella.


Cuando la pasada temporada Dallas y New Jersey intercambiaron a Jason Kidd por Devin Harris fuimos bastantes los que pensamos que los Mavericks se equivocaban apostando por el veterano base de Oakland, que llevaba cierto tiempo dando sintomas claros de una bajada importante en su rendimiento, en detrimento de un jóven jugador que apuntaba maneras para convertirse en un base de primera categoría. Lo que nadie se esperaba es que este jugador salido de la Universidad de Wisconsin explotara de la forma en que lo ha hecho esta temporada.
Con unos promedios de casi 24 puntos y más de 6 asistencias por partido, Harris se ha convertido en el jugador franquicia de los Nets, situando al equipo de East Rutherford en puestos de playoffs, con un record cercano al 50 % de victorias, algo que parecía una quimera antes de comenzar la temporada. Este año, Harris está siendo el mejor base de lo que llevamos de competición, realizando además varias actuaciones memorables de más de 40 puntos, lo que practicamente le asegura la presencia (merecidísima) en el allstar de Phoenix, y de continuar así, el "Most Improved Player", pero lo que es más importante, junto ha un rejuvenecidísimo Vince Carter y al rookie Brook Lopez, ha dado motivos a los aficionados para creer que los Nets pueden estar en Playoffs a finales de Abril.
Hasta hace poco sólo era una promesa, pero desde su llegada a New Jersey se ha convertido en toda una realidad. Este jóven graduado en Sociología y gran jugador de volleyball, ha entrado por la puerta gande en la élite de la NBA .

jueves, 1 de enero de 2009

 
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