Jugadores Legendarios. Julius Erving.

Hubo un tiempo en que el baloncesto se jugaba a ras de suelo, los jugadores eran menos físicos y ningún mortal se atrevía a desafiar a la gravedad. Afortunadamente un hombre fué capaz de reinventar este juego y llevarlo a unas cotas de espectacularidad nunca antes vistas. Aquel hombre nos demostró que se podía "volar", aquel hombre no era otro que el "Doctor J".

Julius Winfield Erving II nació el 22 de febrero de 1950 en Roosevelt, New York. En esa misma localidad comenzó a fraguar su leyenda dando autenticas exhibiciones en el equipo del instituto, en el cual conocería a un amigo que comenzó a llamarle "doctor", debido a que Julius le llamaba a él "profesor". Con los años el famoso apodo de "Doctor J" haría referencia también a su modo de "operar" en la cancha, pero su origen como hemos visto era bastante más simple y poco o nada tenía que ver con el baloncesto.
En 1968 comenzó sus estudios en la Universidad de Massachusetts, donde promedió unos insultantes números de 26 puntos y 20 rebotes por partido en las dos temporadas que permaneció en el campus. En 1971 dejó los estudio sy firmó un contrato como agente libre con un equipo de la extinta ABA, los Virginia Squires. Allí Erving brillaría con luz propia las dos siguientes temporadas, anotando 27 y 31 puntos por partido respectivamente, pero el equipo no era lo suficientemente bueno como para que el Doctor J les llevara a la cima. De tal modo que antes de comenzar la campaña 73/74 los Squires traspasaban a Erving y Willie Sojourner a New York Nets a cambio de George Carter, los derechos del draft de Kermit Washington y dinero.
En tres años en los Nets, Erving consiguió dos campeonatos , tres MVP´s y sobre todo se convirtió en la cara más reconocible de la liga, que siempre será recordada por las imagenes del Doctor J volando con su pelo afro y el balon tricolor.
En 1976 la ABA se desintegró y varios equipos, entre los que estaban los Nets, pasaron a formar parte de la NBA, pero problemas entre el jugador y la franquicia, que no quería pagarle más dinero obligaron a los Nets a vender los derechos sobre Erving a otro equipo, los Philadelphia 76ers tan sólo 24 horas antes de comenzar la temporada, por un precio de tres millones de dólares. En su primer año en la ciudad del amor fraternal Erving causo un impacto inmediato, llevando a los Sixers a las finales , pero allí unos superiores Blazers les apartarían de la gloria. Lo mismo les ocurrio en 1980, cuando cayeron en las finales ante Los Angeles Lakers. El Doctor J era uno de los mejores jugadores de la liga pero a los Sixers les faltaba un jugador dominante en la pintura para pasar al siguiente nivel. En 1981 Erving realiza su mejor campaña en la liga a nivel individual y es elegido MVP, pero el hombre alto que necesitaba Philly seguía sin llegar, al contrario que las derrotas en playoffs. Esta situación cambió en la temporada 82/83, Philadelphia se hizó con Moses Malone, de tal modo que ahora todas las miradas recaían sobre Erving que debía llevar al equipo a cotas nunca alcanzadas. Erving acepto el desafío y los Sixers dominaron la temporada por completo, perdiendo sólo un partido en los playoffs ante Milwaukee y destrozando a Lakers en las finales.
Tras el campeonato el Doctor J continuó cuatro campañas más en activo para retirarse al final de la temporada 86/87, en la que fué homenajeado en cada cancha que visitó. Despues de más de 30000 puntos anotados entre la ABA y la NBA, un anillo de campeón de la NBA , un MVP de la NBA y tres de la ABA, 11 presencias en el allstar, una elección como uno de los 50 mejores jugadores de la historia y multitud de reconocimientos individuales, la carrera de Julius Erving se había terminado. Pero la leyenda del Doctor J seguirá viva para siempre, porque el fué quien inspiró a muchos jugadores ( Michael Jordan reconoció que Erving era su ídolo deportivo) para que el baloncesto sea lo que es hoy, el fué el pionero que se atrevió a llevar el juego a las alturas, desafiando a la lógica y al orden establecido, el fué el primer jugador en dejarnos imagenes inolvidables de mates sobrenaturales como el que hizo frente a Lakers en las finales del 80, el fué un innovador, un creador, un mago del balón y sobre todo.....un jugador legendario.

Iván D.R. 2009