Pau Gasol. Reescribiendo la historia

Hace un año, Pau Gasol recibió muchas críticas por su supuesta debilididad defensiva. Los Lakers acababan de perder la final ante Celtics y muchas personas hacían leña del árbol caído. Personalmente siempre me ha parecido que Gasol era, en cuanto a colocación y anticipación, un defensor de primer nivel; una buena defensa no tiene porque ser una defensa violenta.
Aún así, Pau, haciendo gala de una ambición sin límites y de un deseo por mejorar propio de los más grandes, se propuso ser un jugador más duro, más fuerte, mejor; durante toda la temporada ha seguido una dieta especifica y ha trabajado en el gimnasio tres veces por semana. Los resultados no se han hecho esperar; este curso baloncestístico hemos visto al mejor Gasol a ambos lados de la cancha, en defensa y en ataque.
Pero su gran prueba de fuego, están siendo las finales que los angelinos están disputando frente a los Magic. En los 4 encuentros disputados, Pau está siendo determinante en defensa; está secando por igual a un alero encerrado en un cuerpo de ala-pivot como Lewis y a una bestia física, un cinco puro, como Howard.
Ahora, tras el partido de ayer, en el que Derek Fisher decidió mostrar al mundo que sigue siendo capaz de anotar tiros decisivos y con 3 a 1 en la eliminatoria a favor de Lakers, un jugador español está a punto de proclamarse campeón de la NBA. Un jugador que no conoce límites y que día tras día reescribe su propia historia.